La actriz cubana Aly Sánchez y su esposo Roberto Balmaseda nos muestran que el amor verdadero puede perdurar y prosperar. La pareja está celebrando su decimosexto aniversario juntos, y lo están haciendo de una manera especial: compartiendo una serie de fotos que nos llevan en un viaje a través de los momentos más significativos de su relación.
En la primera imagen de esta emotiva secuencia, vemos a Aly y Roberto como jóvenes enamorados, al parecer, al comienzo de su historia de amor. Pero esta no es solo una historia de romance juvenil; es una crónica de crecimiento, compromiso y apoyo mutuo a lo largo de los años. En las siguientes fotos, los vemos rodeados de su familia, incluyendo a sus adorables hijas, Sophia y Sarah.
Sin embargo, la historia de Aly y Roberto va más allá de momentos familiares felices. También se capturan momentos de complicidad, cariño y apoyo mutuo en sus carreras. Estas imágenes son un testimonio de cómo han estado allí el uno para el otro en los altibajos de la vida y cómo han logrado mantener viva la chispa de su relación.
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Aly compartió sus sentimientos en Instagram, expresando su gratitud por cada momento compartido con su esposo. «Si los próximos años son la mitad de maravillosos que los que hemos vivido, sé que serán increíbles», escribió.
No hace mucho, en abril, la pareja celebró su primer aniversario de bodas, y Aly recurrió a las redes sociales para conmemorar ese día especial. Recordó su boda de ensueño con una emotiva declaración: «Dios sabía eras tú el que estaría ahí para decirme cabecita arriba».
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Hace unas semanas, la carismática actriz y presentadora cubana, Aly Sánchez, en un viaje a través del tiempo, nos llevó a 16 años atrás donde cada foto cuenta una historia única y especial.
Desde sus comienzos, cuando empezaron desde cero viviendo en un efficiency y sin ni siquiera un lugar para sentarse, marcaron el inicio de una historia de amor que ha perdurado por años porque a pesar de tener muy poco, Aly y Roberto eran felices en su modesto espacio de a paredes.
Según cuenta Aly, su esposo Roberto reunió cada centavo para comprarle su primer anillo de compromiso. Tiempo después descubrieron que serían padres, estaban esperando a Sophia, su primogénita.
Su primer apartamento y una anécdota divertida cierra este viaje en el tiempo: En nuestra segunda salida con el «ricote», Aly no tenía ropa y una amiga le prestó su camiseta porque hacía un frío descomunal, y ella fue en tacones a una cita en la playa. Roberto caminó diez cuadras para conseguirle unas chancletas y lo demás, como sabemos, es historia.
Desde esa divertida anécdota hasta el día de hoy, han atravesado un hermoso camino lleno de aventuras y desafíos, y han salido aún más fuertes y unidos. Dos hermosas y talentosas hijas, una carrera exitosa y, sobre todo, un amor que ha crecido con el tiempo, son testigos de la dedicación y el cariño que comparten.
Que este aniversario sea solo un punto de partida para muchos más años de alegría, amor y felicidad juntos. ¡Feliz aniversario!