El intérprete de «Que lo nuestro se quede nuestro» Carlos Rivera y la talentosa Hiromi Hayakawa se conocieron cuando ambos formaron parte de la tercera generación de ‘La Academia’, en el escenario del concurso y su relación se convirtió en un capítulo inolvidable de sus vidas.
La chispa entre Carlos y Hiromi se encendió desde el primer momento. Carlos rememoró aquel encuentro con emotivas palabras: «Inolvidable aquel día que entraste al foro, eras como una muñequita. Mi corazón aún de adolescente se congeló por tu belleza única, después descubriría también la belleza de tu alma».
Su romance se forjó en medio de los desafíos de ‘La Academia’, pero la distancia los separó cuando Hiromi fue eliminada. Sin embargo, el amor perseveró y se fortaleció. Tras el triunfo de Carlos en el programa, la pareja continuó su relación fuera de los reflectores que alguna vez los acompañaron las 24 horas del día.
El amor intenso y juvenil de Carlos y Hiromi finalmente llegó a su fin cuando las demandas de sus crecientes carreras los llevaron por caminos separados y aunque más tarde la buscó para ver la posibilidad de regresar, ella no aceptó, y la vida tomó su curso. «Me arrepentí muchísimo, después se lo dije. Yo sí quería, pero ella ya no porque además ya tenía una pareja»,»Para mí fue difícil eso cuando sabes que tienes la culpa, que dejas a ir a alguien y que después ya no hay vuelta atrás”, compartió el artista.
La carrera de Hiromi en el teatro musical y el doblaje continuó floreciendo. Carlos reconoció que su influencia lo llevó a explorar el teatro, con «El rey León» en España como su debut estelar.
Sin embargo, la historia dio un giro desgarrador en 2017, Hiromi se casó con Fernando Santana y en la recta final de su primer embarazo, el 27 de septiembre de ese mismo año perdió la vida debido a complicaciones en el parto, llevándose también a su hija.
La triste noticia sacudió a Carlos, quien utilizó su plataforma en Instagram para despedirse de su primer amor con un mensaje conmovedor. «Aunque hace muchos años de que nuestros caminos se separaron, fuiste muy importante en mi vida. Dicen que el primer gran amor nunca se olvida, por ello yo jamás podría olvidarte… Y como dice la canción que te escribí por aquellos tiempos, ‘En recuerdos dejaré todo lo nuestro’», compartió.
La memoria de Hiromi sigue viva en Carlos y en todos los que la conocieron. Su historia de amor y pérdida nos recuerda lo profundo que son los lazos que creamos en la vida, y cómo hasta el primer gran amor deja una marca fuerte en el corazón.